Cumpliendo
puntualmente con el ritual anual de estas fechas, el sindicato predilecto de la
empresa ha vuelto a repartir una hoja informativa donde nos describe
detalladamente, por si alguien aún no se había enterado, las infames
condiciones ambientales que se están generando en el interior de las plantas,
debido a las altísimas temperaturas y niveles de humedad que se alcanzan y que
cada día tenemos que soportar quienes trabajamos en ellas.
Y, también como
todos los años, intentan convencernos de que el problema se produce, no porque
los equipos de climatización son una patata, sino por la falta de previsión y
la mala utilización de los equipos de atemperación existentes. Y vuelve a
cumplirse la liturgia de advertencias a la dirección y de amenazas veladas de
medidas contundentes si la empresa no “atempera” las plantas. ¡Claro, como el
calor sólo nos sofoca y angustia a los que curramos!
Llegará septiembre, y como siempre, no se habrá hecho
nada. El problema quedará en el olvido, y el año que viene volveremos a
encontrarnos en la misma situación de todos los veranos. Pero ellos volverán a
repetir la misma cantinela una y otra vez…
Porque el verdadero problema es
que no hay ninguna voluntad por parte de la empresa de dar una solución
definitiva a la deficiente climatización de las plantas, porque sabe que no va
ha haber ninguna respuesta contundente por parte de quien tiene la mayoría en
el Comité de Empresa, y por qué le es más rentable que los delegados de UGT
sorteen cada verano unos cuantos ventiladores por las líneas, que realizar la
inversión para aumentar la capacidad de enfriamiento de las instalaciones con
nuevos equipos y climatizar adecuadamente las plantas.
¿Cuánto tardaría en solucionarse el problema si un día
los trabajadores decidiéramos quedarnos en la puerta y no entrar a trabajar? ¡Seguro
que se solucionaba rápidamente!
Y sin embargo, por si estas
infames condiciones ambientales que estamos padeciendo no fueran suficientes, tenemos
que ver continuamente como la gerencia y el sindicato afín se vanaglorian y
felicitan mutuamente por la capacidad de producción, la calidad y flexibilidad
de la planta, mientras se somete a los trabajadores a unos ritmos de trabajo
inhumanos, con puestos donde hay compañeros que se pasan el día sudando y
corriendo de pito a pito, sin prácticamente poder beber un trago de agua, y a los
que además se les somete a una presión inaguantable para que no paren la cadena,
no comentan ni un solo error, no marquen rojo en la pistola… ¡¡la producción es
la prioridad!!, aunque nos dejemos en ello nuestra salud.
Pero
ahora se acercan las vacaciones, días en los que podremos descansar, relajarnos
y disfrutar de la familia y los amigos. A la vuelta tendremos tiempo de
reflexionar si podemos seguir aguantando las condiciones laborales que nos
están imponiendo la ambición ilimitada de la empresa y la pasividad y hasta
complicidad del sindicato que ya es la marca
blanca de la dirección de Ford.
¡QUE DISFRUTÉIS DE ESTAS
MERECIDAS VACACIONES!
Almussafes, 29 de julio de 2015